Él se psicoanaliza para presentarnos los sueños que perturban su descanso cada noche. Aquellos en los que corre, pero permanece clavado en el mismo sitio. En los que se da una carrera, pero no llega a ninguna parte. Sueños en los que otra persona usa su voz y sus palabras. Todos hemos tenido experiencias similares durmiendo.
En el vídeo musical de la canción "Tripping" de 2005, Robbie Williams recrea sus sueños con imágenes en movimiento. Las paredes del pasillo de un hotel parecen transformarse y moverse, le pasan por delante mientras él trata de escapar desesperadamente, pero su esfuerzo es en vano. Una escena terrorífica que recuerda al clásico del cine "El Resplandor".
Nuestro protagonista se enfrenta a ansiedades similares al intentar subir las escaleras del hotel. Éstas simplemente se adaptan a sus esfuerzos cada vez más desesperados, como si de la Stairmaster de un gimnasio se tratara, y una vez más no llega a ningún lugar. Un dilema similar le espera en un laberinto desconcertante. La metáfora más evidente de la desorientación. Una misión casi imposible.
En otra escena, se encuentra en un angosto ascensor con un hombre de gran estatura vestido de mujer. Un lugar claustrofóbico del que no puede escapar, hasta que las puertas del ascensor vuelven a abrirse. Si efectivamente se abren y el ascensor no se queda atascado entre pisos.
Paisajes quiméricos y oníricos que se alternan con escenas de él durmiendo; dando vueltas en la cama atrapado en una aparente pesadilla. Se observa al protagonista a vista de pájaro, una perspectiva que enfatiza su indefensión. Pero, quién está realmente indefenso, y frente a qué o quién, queda a discreción del espectador.
En el video de "Tripping", salen a la luz nuestros miedos más primarios, que reflejan los problemas no resueltos del día a día mediante la visualización metafórica de la voluntad desesperada de actuar, pero la imposibilidad de hacerlo. Williams experimenta indirectamente estos y otros conflictos, enfrentándose tanto a sí mismo, como a los personajes de sus sueños. Pero a pesar del dramatismo, el vídeo no trasmite al espectador sensación de amargura o depresión.
¡Todo lo contrario! El llamativo papel pintado, vestuario, accesorios y ambientes de colores vivos dan un aire positivo a los acontecimientos que se desarrollan ante nosotros. Las paredes no son sólo blancas o monocromas, los imaginativos patrones proporcionan un trasfondo orquestado. Junto con otros elementos decorativos, empatizan con el estado metafísico de los actores.
El término "Tripping" tiene muchos significados: volverse loco, tropezarse, exagerar, estar drogado... En qué estado de ánimo se encontraría Robbie Williams cuando escribió esta canción es una incógnita. Ciertamente, él tiene la última palabra. Tal vez simplemente estaba sosteniendo un espejo frente al espectador. Quién sabe...
Lo que sí sabemos es que los papeles pintados y sus patrones pueden ser embriagadores y dar alas a la imaginación... ¡Sin necesidad de consumir sustancias ilegales! Elegir sabiamente el papel pintado adecuado puede hablar a las claras de nuestra personalidad y revelar parte de la misma, permitir una mirada a nuestro carácter, o simplemente expresar emociones: un poco psicodélico, algo atrevido, una pizca diferente o simplemente armonioso. Esto simplemente demuestra que existe un papel pintado para cada persona y estado de ánimo.
Texto: szim